LA VIOLENCIA NO TAN SOTERRADA DEL «PROCÉS»

El nacionalismo tiene en el «procés» un proyecto totalitario que ha excluido de la esfera social a la mitad de la población, haciendo creer a la otra mitad que es víctima de un estado fascista que les quita el dinero y la libertad, y que sus conciudadanos son invasores o colonos. Así pues, con el germen del odio anidado en buena parte de ellos, ¿cómo vamos a sorprendernos de que una manifestación acabe a porrazos y a tortas? ¡Pues normal, si es que no puede pasar otra cosa!

MALPARITS

El nacionalisme va convertir la tragèdia dels atemptats del 17-A en una eina contra el govern, contra el rei i contra Espanya.
Ara, un any després, tot continua igual. En comptes de recordar les víctimes, continuen amb la obsessió del procés. Malparits!